¿Es bueno estudiar con música?
La música tiene beneficios muy importantes para el cerebro, de hecho, hay estudios que corroboran que, aprender a tocar un instrumento en la infancia mejora el rendimiento cognitivo en diversos aspectos.
En el mundo de los estudiantes, las técnicas de estudio son herramientas fundamentales para alcanzar el fruto académico. Entre estas, los esquemas destacan como una de las más útiles y prácticos a la hora de estudiar. Sin embargo, no todos los esquemas son iguales. Para que realmente sirvan para estudiar, es importante elaborarlos de manera adecuada y estratégica.
En este artículo de micampus, te presentamos unos consejos y recomendaciones sobre cómo hacer esquemas que realmente sirvan para estudiar. Incluiremos desde los conceptos básicos hasta recomendaciones prácticas, pasando por los diferentes tipos de esquemas y las herramientas disponibles para su creación.
Un esquema es una representación gráfica y jerarquizada de las ideas principales y secundarias de un tema. Es una herramienta de estudio que nos permite organizar, comprender y memorizar información de manera más efectiva.
Existen diferentes tipos de esquemas, cada uno con sus propias características y aplicaciones:
Es el tipo de esquema más común. Se caracteriza por su estructura en forma de árbol, con las ideas principales en las ramas principales y las ideas secundarias en las ramas secundarias.
Este tipo de esquema utiliza flechas para conectar las ideas entre sí, mostrando las relaciones que existen entre ellas.
Este tipo de esquema se organiza en forma de tabla. Las ideas principales en las filas y las ideas secundarias en las columnas.
Este tipo de esquema se utiliza para representar procesos o secuencias de pasos.
Los esquemas nos sirven para memorizar mejor por varias razones:
Los esquemas se pueden utilizar en diferentes situaciones de estudio, por ejemplo:
Cuando estamos estudiando un tema nuevo por primera vez, los esquemas nos pueden ayudar a comprender la estructura del tema y a identificar las ideas principales.
Los esquemas son una herramienta muy útil para repasar un tema antes de un examen, ya que nos permiten ver de forma rápida y resumida las ideas más importantes.
Los esquemas también nos pueden ayudar a preparar una presentación, ya que nos sirven como guía para organizar nuestras ideas y estructurar nuestro discurso.
Para hacer un esquema perfecto, sigue estos pasos:
Lo primero que debes hacer es leer el texto que vas a esquematizar detenidamente. Asegúrate de comprender bien el tema y de identificar las ideas principales.
Una vez que hayas leído el texto, subraya las ideas principales. Estas ideas serán las que formarán la base de tu esquema.
Ordena las ideas principales y secundarias de forma jerárquica. Las ideas principales deben ir en las ramas principales del esquema, y las ideas secundarias en las ramas secundarias.
Utiliza palabras clave para representar las ideas en tu esquema. Las palabras clave deben ser cortas, precisas y fáciles de recordar.
Puedes utilizar recursos visuales como flechas, colores y símbolos para hacer tu esquema más atractivo y fácil de comprender.
Una vez que hayas terminado tu esquema, revísalo detenidamente para asegurarte de que no hay errores y de que todas las ideas están bien organizadas.